miércoles, 15 de abril de 2009

Somos Un País Mal Administrado
Por: Mesías Guevara Amasifuén
Uno de los retos que tienen las naciones, es desarrollar su competitividad, para que ello ocurra es necesario que identifiquen cuales son sus ventajas competitivas, las mismas que deben ir mas allá de las ventajas comparativas. Ante esa situación resulta imperativo desarrollar el pensamiento estratégico, que tenga como Visión y Misión, concebir el país en la que queremos vivir, así como las gran tareas que ayuden a consolidar los objetivos nacionales, tales como la eliminación de la pobreza, la exclusión social, la eliminación de la corrupción y el desempleo.
Para desarrollar el pensamiento estratégico grandes autores como M. Porter, Prahalad, Hamel, Mintzberg, entre otros, nos dan grandes lecciones los mismos que nos ayudan a lograr este desafío.
En ese derrotero debemos definir los recursos y capacidades con que cuenta nuestro país, aquí, sin lugar a dudas destacan los recursos naturales, que los encontramos distribuidos en nuestro mar azul que alberga una gran riqueza marina, en la estoica serranía que encierra los tesoros minerales, en la alegre costa que en sus valles albergan los proyectos agroindustriales e industriales y en la misteriosa selva que guarda en su seno la biodiversidad y hermosos bosques.
También encontramos el legado histórico, que nos han dejado los antiguos peruanos. A pesar del infortunio, de las vicisitudes que le toca enfrentar, el peruano también resulta ser un gran recurso de nuestro país, y se caracteriza por sus nobles y grandes sueños, por su gran creatividad, por su ímpetu de salir adelante junto a su familia. Después de inventariar los recursos con que cuenta nuestro país, no podemos afirmar que somos un país pobre, lo que sí debemos manifestar es que somos un país mal administrado.
Como país debemos identificar cuales son las actividades primarias y estas deben definirse sobre nuestro core competence, es decir, sobre nuestras habilidades esenciales, por eso es menester que siempre estemos en la dinámica constante de identificarlos y consolidarlos. Las actividades primarias deben ser parte de una cadena o malla de valor, los que deben tener como objetivo, generar una ventaja competitiva, la misma que debe ser sostenible y permanente, para de esa manera poder consolidar un liderazgo mas allá de nuestras fronteras. Cabe resaltar que las habilidades esenciales deben ser difíciles de imitar y que se generan con la constante innovación
.
El escenario que hoy nos toca vivir tiene como característica fundamental los cambios constantes, así como los altos desarrollos tecnológicos. Desarrollar el pensamiento estratégico debe ser una actividad continua y de alta prioridad, los programas de largo plazo, apoyados en las herramientas como la prospectiva, su uso deben ser más continuo en las diversas actividades políticas, sociales, económicas y tecnológicas.
Somos un país mal administrado como consecuencia de la falta de liderazgo y capacidad de gestión de los que lideran el manejo de la cosa pública. Esta carencia lamentablemente se da en todos los niveles del gobierno, es decir, nacional, regional, provincial y distrital.
Colabora con esta carencia el alto nivel de corrupción, los momentos actuales nos exigen que consolidemos en nuestro país, una revolución cultural y espiritual que contemple el crecimiento y desarrollo de los peruanos, para poder lograr la conquista del peruano por si mismo y que a la vez podamos alcanzar la conquista del Perú por los peruanos, para los peruanos.

No hay comentarios: